Archivo | febrero, 2014

La prehistoria, y los conceptos erróneos sobre ella.

11 Feb

En la imaginación popular, la historia de la humanidad empezó cuando fundaron las civilizaciones sumerias y egipcias hace 5000 años, y hasta entonces, nuestros ancestros eran “medio monos” que vivían en cuevas.

En realidad, la historia de la humanidad empezó cientos de milenios antes de la aparición de las primeras civilizaciones en el Oriente Medio, pero por la falta de documentos escritos, la información que tenemos es muy limitada. Sin embargo, con los avances en los estudios arqueológicos y genéticos, muchos enigmas de la prehistoria están saliendo a la luz, aunque todavía queda mucho por descubrir.

En este artículo quiero hablar de los conceptos equivocados más comunes que tenemos sobre la prehistoria.

Un pueblo paleolítico

Un pueblo paleolítico

Error 1: durante toda la prehistoria éramos “medio-monos”

La prehistoria de la humanidad fue una época muy larga, desde hace 4 millones de años cuando algunos monos empezaron a caminar sobre 2 patas, hasta hace 5000 años cuando los sumerios inventaron la escritura. La evolución humana no seguía un único hilo, sino varias ramificaciones que se divergían y convergían. Hace 2 millones de años, Homo erectus ya había perdido la mayor parte del pelo corporal, así que se puede decir que a partir de ahí ya habíamos dejado de ser “monos”.

Los humanos anatómicamente modernos, Homo sapiens sapiens, evolucionaron en África hace 200.000 años, y desde entonces ya poseían la misma fisonomía y capacidad intelectual que cualquier ser humano en la actualidad. De hecho, cuando nuestros ancestros salieron de África hace menos de 100.000 años, ya eran humanos modernos en todos sentidos, y más probable, ya llevaban ropa y calzado, se cortaban el pelo, se maquillaban y se afeitaban.

La reconstrucción del rostro de homo sapiens de hace 100.000 años

La reconstrucción del rostro de homo sapiens de hace 150.000 años

Error 2: el hombre prehistórico vivía solo en cavernas

Tenemos esta idea porque la mayoría de los hallazgos arqueológicos de la prehistoria se hallaron en cuevas como en Altamira y Atapuerca. Sin embargo, eso no implica que las cuevas eran su único hogar de residencia. Hace 50.000 años, los humanos (modernos y arcaicos) ya habían colonizado casi todos los rincones de África, Europa, Asia y Australia, y no en todos lugares había cuevas.

Más probable, como llevaban la vida nómada de cazador-recolector, construían cabañas con madera, huesos y pieles de animales, o cualquier material que podían encontrar en el entorno. Las cuevas podían haber sido lugares de reunión entre distintas tribus para celebrar ceremonias religiosas e intercambiaban bienes y compañeros sexuales.

No dudo que muchas poblaciones podían haber refugiado en cuevas durante temporales violentos, pero más probable, no era el tipo de residencia más típica.

Muy probable, los humanos antiguos construyeron sus viviendas con huesos de mamut

Muy probable, los humanos antiguos construyeron sus viviendas con huesos de mamut

Error 3: en la prehistoria comían carne cruda

Eso, otra vez, depende de la época en cuestión. A día de hoy, los arqueólogos todavía no llegan a un consenso acerca de cuándo empezamos a comer comida caliente. Estimaciones varían desde hace 1.5 millón de años a hace solamente 500.000 años. Algunos científicos alegan que comer comida caliente fue un paso importante en la evolución, porque la comida cocinada facilita la absorción de calorías, que deja crecer el volumen del cerebro. Pero de todos modos, hace 100.000 años, nuestros ancestros, tanto homo sapiens como neandertales, ya calentaban la comida antes de comerla.

Como cazadores-recolectores, la gente se alimentaba de lo que el entorno ofrecía. Dónde abundaban animales grandes como bisontes y mamuts, la gente probablemente llevaba una dieta más carnívora, pero en bosques donde abundaban plantas comestibles, la gente podía haber obtenido una gran parte de sus nutrientes desde frutas y vegetales.

Una charla de TED sobre la evolución del cerebro humano y su relación con la comida cocinada

Error 4: la sociedad prehistórica era muy machista

Existe un concepto de que el sexo en la prehistoria consiste en un hombre pegando a una mujer para dejarla inconsciente y arrastrarla a una cueva, donde se imponía sexualmente sobre ella.

Irónicamente, en la mayoría de las tribus cazadoras-recolectoras del siglo XX, había bastante igualdad de sexos, donde la jerarquía de cada uno solía depender más de la edad y la experiencia y no de si era hombre o mujer. Las parejas se formaban respetando un claro código de cortejo, y raptos forzosos o violaciones no ocurrían con mayor frecuencia que en las sociedades “civilizadas” del Occidente.

Con eso no quiero generalizar ni idealizar la edad paleolítica, pero hasta ahora todavía no hemos encontrado ninguna prueba que demuestra que las sociedades prehistóricas eran machistas, y tampoco ninguna prueba demostrando que no lo eran.

Los San, un pueblo cazador-recolector de la época actual, vive en una sociedad con mucha igualdad sexual

Los San, un pueblo cazador-recolector de la época actual, vive en una sociedad con mucha igualdad de sexos

Error 5: las lenguas que se hablaban en la prehistoria era muy simple

Eso también depende de la época y de la subespecie humana que se trata. La lengua forma parte de nuestro instinto innato y desde que nuestros ancestros eran humanos anatómicamente modernos hace 200.000 años, ya hablaban idiomas tan complejos como inglés, español, chino o árabe. Seguro que no tenían palabras como ciudad, calle, ordenador, coche o bicicleta, pero probablemente tenían miles de palabras para relacionarse con la naturaleza que no podemos ni imaginar.

Es cierto que la escritura fue inventada mucho más tarde, pero la falta de escritura no significa que un idioma no existe. Hasta el siglo XX un gran porcentaje de la población española no sabía leer ni escribir, pero nadie diría que no hablaban una lengua humana.

Error 6: los neandertales eran tontos, brutos, y más parecidos a monos que nosotros

Según los últimos análisis genéticos, los neandertales no era de un “escalón anterior” de la evolución humana, sino una “escalón paralelo”. Era una subespecie humana que evolucionaron durante cientos de miles de años en Europa y Asia para adaptarse en un clima frío, mientras nuestros ancestros, Homo sapiens sapiens, evolucionaron en África bajo un clima tropical. Cuando las dos especies se encontraron hace más de 50.000 años, se mezclaron, pero a día de hoy, el legado genético de los neandertales es muy limitado (0-4%), y las causas todavía se desconocen. Pero de todos modos, el nivel de sofisticación de sus herramientas, sus costumbres de cuidar a los enfermos crónicos y enterrar a sus muertos, las pinturas rupestres que dejaron en Altamira etc, demostraron que de tontos y brutos no tenían nada.

Esta pintura rupestre en Altamira data de hace 40.000 años, y más probable sus autores eran neandertales

Esta pintura rupestre en Altamira data de hace 40.000 años, y más probable sus autores eran neandertales

Error 7: en la prehistoria la gente vivía en comunidades muy aisladas y endogámicas

Durante el paleolítico, la gente vivía en tribus nómadas pequeñas de entre 20 a 50 personas, caminando constantemente de un lugar a otro en busca de alimentos, pero se mantenían en contacto con regularidad con otras poblaciones. Hallazgos arqueológicos encontraron herramientas hechas de minerales a miles de kilómetros de su lugar de origen, y el análisis genético de un niño que vivía en el Éste de Siberia hace 20.000 años reveló que tenían antepasados recientes procedentes de Europa. Eso demuestra que las poblaciones humanas establecían redes de comunicación que llegaban hasta miles de kilómetros de distancia.

Figurines de mujeres voluptuosas se encontraron desde Rusia hasta la Peninsula Ibérica, demostrando que pueblos muy distanciados compartían la misma forma de expresión artística

Figurines de mujeres voluptuosas se encontraron desde Rusia hasta la Peninsula Ibérica, demostrando que pueblos muy distanciados compartían la misma forma de expresión artística

Error 8: la vida cambió poco del Paleolítico al Neolítico

En mi opinión personal, la transformación del “Paleolítico” a “Neolítico” hace 10.000 años fue la revolución más importante de la historia humana, porque el ser humano dejó atrás la vida de cazadores/recolectores para dedicarse a la agricultura y la ganadería.

Nuestros ancestros empezaron a asentarse en pueblos con poblaciones cada vez más grandes que les obligaron a formar sistemas políticos y económicos más sofisticados. Muchos de los conceptos sociales que tenemos ahora, como la propiedad inmobiliaria, la división de trabajo, los ahorros, el gobierno, el estado, las fronteras y los impuestos se desarrollaron durante el Neolítico.

Hace 8000 años, los europeos probablemente eran de piel oscura y ojos azules.

Hace 8000 años, los europeos nativos probablemente eran de piel oscura y ojos azules. Se volvieron»blancos» debido al cambio de dieta

A nivel biológico, los cambios en la dieta y el estilo de vida provocaron una evolución acelerada en el fenotipo humano, que desarrolló mecanismos digestivos para digerir lactosa, alcohol y una mayor cantidad de hidratos de carbono, tanto como la inmunología a cientos de enfermedades contagiosas, la mayoría surgida a causa de la domesticación de animales.

Más probable, los cambios en la sociedad, economía, estilo de vida y fisonomía humana del Paleolítico al Neolítico fueron mucho más pronunciados que entre el Neolítico y el siglo XVIII, en la víspera de la revolución industrial.

En el Neolítico, ya surgían urbes de hasta 10.000 habitantes, como Catalhoyuk en Turquía

En el Neolítico, ya surgían urbes de hasta 10.000 habitantes, como Catalhoyuk en Turquía

Otra forma de contar la historia humana

Personalmente, no estoy muy de acuerdo de contar la historia de la humanidad dividiéndola entre la “prehistoria” y la “historia”, marcada por el invento de la escritura. Prefiero contar la historia a través de los grandes saltos evolutivos, revoluciones tecnológicas y migraciones masivas.

Pero eso ya es tema que trataré en otro artículo.